Por fin el Junior ya esta acudiendo al juzgado para estampar su firma los primeros días de cada mes. Como menciona el Diario de Yucatán en esta nota, el abusado chamaco tiene que cumplir con esta condición impuesta mientras dure el juicio, que todos ya sabemos como va a acabar.
Por otro lado, seguramente ya saben del desafortunado deceso de los policías en Chenku, mientras degustaban una comida. Todo parece indicar que fue un ajuste de cuentas, aunque no se sabe mucho al respecto. Lo mas triste, desde mi punto de vista, son las declaraciones de la Jefa, en donde hace ver que el triste suceso es simplemente una respuesta a la buena gestión que esta haciendo al frente del gobierno estatal.
Cuando lo leí, me pregunte una y otra vez sobre este asunto. De verdad el hecho de que alguien muera en condiciones violentas y poco claras, es signo de que las cosas están bien en Yucatán? Yo no lo creo, y supongo que la gente tampoco, después de la marcha por la paz llevada a cabo en los últimos días del mes de enero, con una respuesta satisfactoria por parte de la sociedad Yucateca. Es preocupante la violencia que poco a poco se va dando en nuestra entidad, cuya característica princípal, hasta hace algunos años, habia sido precisamente la tranquilidad con la que vivíamos. Desde luego, aun no hay que alarmarse, pero si hay que empezar a hacer algo, o cuando menos reflexionar sobre este asunto. La citada marcha supongo que sirvió para concientizar a la población (y supongo que a las autoridades) de que en nuestro ambiente algo pasa, y que estamos preocupados por ello. Ojala la Jefa y el Papa del Junior se pongan las pilas y empiecen a darse cuenta de que tienen que hacer algo.
Imaginense la escena, cuando la Jefa le diga a la viuda del Policía asesinado: "Seño, su marido murio de forma violenta, el crimen no quedara impune, pero quédese tranquila, su muerte es señal inequívoca de que el gobierno anda pisando callos."
Ahí queda mi opinión sobre el asunto. Mala o buena, equivocada o acertada, pero mia. Seguiremos informando.
Por otro lado, seguramente ya saben del desafortunado deceso de los policías en Chenku, mientras degustaban una comida. Todo parece indicar que fue un ajuste de cuentas, aunque no se sabe mucho al respecto. Lo mas triste, desde mi punto de vista, son las declaraciones de la Jefa, en donde hace ver que el triste suceso es simplemente una respuesta a la buena gestión que esta haciendo al frente del gobierno estatal.
Cuando lo leí, me pregunte una y otra vez sobre este asunto. De verdad el hecho de que alguien muera en condiciones violentas y poco claras, es signo de que las cosas están bien en Yucatán? Yo no lo creo, y supongo que la gente tampoco, después de la marcha por la paz llevada a cabo en los últimos días del mes de enero, con una respuesta satisfactoria por parte de la sociedad Yucateca. Es preocupante la violencia que poco a poco se va dando en nuestra entidad, cuya característica princípal, hasta hace algunos años, habia sido precisamente la tranquilidad con la que vivíamos. Desde luego, aun no hay que alarmarse, pero si hay que empezar a hacer algo, o cuando menos reflexionar sobre este asunto. La citada marcha supongo que sirvió para concientizar a la población (y supongo que a las autoridades) de que en nuestro ambiente algo pasa, y que estamos preocupados por ello. Ojala la Jefa y el Papa del Junior se pongan las pilas y empiecen a darse cuenta de que tienen que hacer algo.
Imaginense la escena, cuando la Jefa le diga a la viuda del Policía asesinado: "Seño, su marido murio de forma violenta, el crimen no quedara impune, pero quédese tranquila, su muerte es señal inequívoca de que el gobierno anda pisando callos."
Ahí queda mi opinión sobre el asunto. Mala o buena, equivocada o acertada, pero mia. Seguiremos informando.
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