martes, 4 de enero de 2011

En memoria...

Don Pedro, un español avecindado en Yucatán desde ya hace muchos años, era el jefe de mi madre en aquel negocio de cuyo recuerdo se va perdiendo conforme pasan los años. Era un fumador empedernido y una persona muy peculiar en sus maneras y su andar, aunque siempre compartió (al menos conmigo) un poco de su vasta experiencia acumulada a través de muchos años de trabajo y esfuerzo. 
Gracias a el, tome la decisión de la carrera a elegir, ya que yo estaba interesado en estudiar ingeniería en sistemas, pero el me sugirió que optara por Electrónica, decisión de la cual no me arrepiento, y que tome tomando en cuenta sus consejos.
En alguna oportunidad, el me contó que cuando mas joven su padre tenia un negocio (si mal no recuerdo una tienda de autoservicio en su natal España) y que el trabajaba de sol a a sol con el. El trato que recibía no era precisamente el mejor, y en ese entonces, Don Pedro no entendió en ese momento el porque de la actitud de su progenitor. Nunca entro en detalles de todas las penurias que tuvo que pasar, pero tuvieron que ser bastantes, porque sus palabras eran enérgicas y llenas de sentimiento. Así, el tampoco entendía en ese entonces porque su padre no trataba igual a sus hermanos, que recibían lo mejor al menor esfuerzo.
Al paso de los años (y según sus propias palabras) el agradecía a su padre por haber sido así para con el. Cuando escuche esto, mi reacción fue la de preguntar el porque, y su respuesta fue tajante, y aun la tengo grabada en mi mente:

"Porque me enseño a trabajar"

Según sus palabras, sus hermanos vivían cómodamente, aun en la actualidad, pero no sabían hacer nada. En cambio el, como había aprendido a trabajar, se hizo de mucho dinero con los diversos negocios que estableció a lo largo de su vida. El me decía que dos veces perdió su fortuna, pero que se levanto gracias a que sabia como trabajar, razón por la cual agradecía a su padre todo lo que le hizo pasar.
Don Pedro murió hace algunos años de cáncer en la garganta, pero esto que les cuento nunca se me ha olvidado, y cada vez que puedo lo comento, porque me parece una anectoda muy interesante.


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