viernes, 15 de octubre de 2010

ANECDOTA

Por el año de 1996, cuando ingrese a la Prepa, recuerdo con mucha fuerza esto que les voy a contar. Como parte del plan de estudios en primer año, debíamos tener practicas en el laboratorio, para complementar la materia de física. Para ello, cada semana teníamos que entregar un reporte por escrito, en donde plasmábamos los resultados de dichas pruebas.
En una de esas tantas entregas, un compañero (del cual no recuerdo su nombre) me pidió mi reporte, ante la falta de la elaboración del suyo (Es decir, no lo hizo). Yo, amablemente e ingenuamente, se lo entregue para que copiara (o fusilara, como mejor a usted amigo rinconero, le guste decirle) y hasta ahí, todo bien.
De repente, cuando me devolvieron el reporte calificado por la maestra, esta me pregunto del porque había entregado dos reportes. Ante la evidente cara de extrañeza, yo acudí con ella para verificar, y ahí caí en cuenta de lo que paso.
El compañero, antes referido, copio todo mi reporte, nombre incluido. Sobra decir que fui severamente regañado por la maestra y al otro fulano, bueno, ustedes ya saben como le fue. Es decir, en ese momento me causo mucho enojo, pero ahora cuando lo recuerdo, no puedo evitar reírme sin parar.
Y creo que me seguiré riendo por mucho tiempo.

1 comentario:

Lola Sanz dijo...

Quien fue? Dime como era y yo te digo su nombre jeje